top of page
Un niño con problemas de autismo

Autismo

El autismo es un trastorno del neurodesarrollo que se manifiesta en deficiencias en la comunicación, interacción social y comportamientos repetitivos. Su espectro varía en gravedad, y generalmente se diagnostica en la infancia.

Autismo

El trastorno del espectro autista, anteriormente conocido como trastorno generalizado del desarrollo. El trastorno del espectro autista se entendía como un conjunto formado por cinco trastornos distintos: trastorno autista, síndrome de Asperger, trastorno desintegrativo de la infancia, síndrome de Rett y trastorno generalizado del desarrollo no especificado.

El consenso clínico reciente ha cambiado la conceptualización del trastorno del espectro autista hacia un modelo continuo en el que la heterogeneidad de los síntomas se considera inherentes al trastorno, y las principales alteraciones diagnosticas radican en dos ámbitos: déficits en la comunicación social y conductas limitadas y repetitivas.

El trastorno del especto autista (TEA) suele evidenciarse durante el segundo año de vida, y en los casos graves, se observa una falta de interés por las interacciones sociales incluso en el primer año de la vida. No obstante, en casos mas leves, las principales alteraciones pueden pasar inadvertidas durante varios años.

En niños con un funcionamiento intelectual normal y alteración leve de la función. Lingüística es posible que el trastorno no se identifique hasta que son mayores y aumentan las demandas académicas y sociales. Los niños con un TEA a menudo muestran un interés idiosincrásico intenso por una serie limitada de actividades, se resisten a los cambios y no responden al entorno social como lo hacen el resto.

Los síntomas básicos son:

  • Déficits persistentes en la comunicación social y la interacción.

  • Patrones de conducta, intereses y actividades restrictivos y repetitivos.

  • Alteración del lenguaje y comunicación.

  • Irritabilidad

  • Inestabilidad del estado de ánimo y de la afectividad.

  • Aumento de la respuesta a estímulos sensoriales.

  • Comorbilidad con hiperactividad y falta de atención.

  • Desarrollo de habilidades precoces

  • Insomnio

  • Infecciones leves y síntomas digestivos

 

El TEA suele ser una enfermedad de por vida, aunque heterogénea, cuya gravedad y pronostico varían ampliamente. Los objetivos del tratamiento de los niños con TEA consisten en incidir sobre las conductas principales que mejoren sus interrelaciones sociales, su comunicación, ampliar estrategias para integrarse en la escuela, desarrollar relaciones significativas con sus compañeros y aumentar las habilidades a largo plazo para una vida independiente.

 

Aquellos pacientes que tienen acceso temprano a tratamiento multimodal mejoran significativamente. El ambiente debe ser altamente estructurado e incluir profesores de educación especial, terapia del lenguaje y logopedia, tratamiento vocacional y entrenamiento en habilidades adaptativas. El tratamiento conductual reduce los comportamientos no deseados, promueve el lenguaje y la interacción social y, además, aumenta habilidades que fomentan la independencia.

 

Es fundamental el trabajo de los padres para ayudar a su hijo y buscar los servicios necesarios disponibles en su área. Hay asociaciones de padres de niños con autismo que son muy útiles para organizar y distribuir los recursos.

 

Los programas educativos deben basarse en principios estructurados e incluir sistemas de aprendizaje del comportamiento, terapia del lenguaje y terapia ocupacional. La psicoterapia está indicada en los autismos de alto grado de funcionamiento el en el trastorno de Asperger, todo ello encaminado a mejorar las competencias sociales o la expresión de sentimientos.

 

A veces, es necesario el uso de medicación para tratar síntomas psiquiátricos que pueden aparecer, como antidepresivos para reducir los comportamientos repetitivos; y antipsicóticos para mejorar la interacción social.

bottom of page